La Isla del Sol es uno de los puntos turísticos más lindos e importantes de Bolivia, una tierra de paisajes verdaderamente sorprendentes. Situada en el Lago Titicaca, y con una superficie de 14,3 m², está repleta de sitios arqueológicos de la época de la civilización inca y lugares desde donde se puede apreciar algunas de las vistas más espectaculares de Latinoamérica.

También conocido como Isla Titicaca (palabra que da nombre al lago donde se encuentra y que significa ‘roca del puma’ en quechua), este lugar en el pasado fue un santuario inca, poseyendo un templo con vírgenes dedicadas al dios Inti (Sol); se trata del Templo de las Vírgenes del Sol, cuyas paredes están hábilmente edificadas. Asimismo, un sinfín de terrazas cubre la isla, ya que se trata de un antiguo campo de producción agrícola.

Lugar pródigo en sitios arqueológicos, la Isla del Sol tiene en la Roca Sagrada (o Roca de los Orígenes) y en las Ruinas de Chinkana dos de sus puntos más atractivos. Según la tradición, de la primera, que contiene dos figuras humanas, salieron Manco Cápac y Mama Ocllo a fundar el Cusco y todo el imperio inca. A su vez, Chinkana es también llamada de laberinto, por disponer de incontables pasadizos de una sala a otra; es una suerte de misteriosa ciudadela construida sobre una pendiente.

Otros sitios de enorme interés son el Palacio de Pilkokaina (cuyo significado es ‘el sitio donde descansa el ave’), con paredes de piedra y varios nichos que sirvieron como altares para figuras sagradas; el Templo del Sol, también de piedra y perfecta arquitectura; y las Mil Escalinatas de Saxamani, que conducen a la Fuente de las Tres Aguas, en lo que para ellos era una verdadera fuente de la juventud, de acuerdo con sus creencias. Asimismo, formaciones geológicas en la superficie de la isla que, según la leyenda, son las pisadas del sol, maravillan al turista que visita este hermoso lugar.

Quienes deseen conocer más acerca de la cultura incaica pueden visitar también el Museo Arqueológico de Challapampa, donde se exponen muchas piezas de la antigua civilización, incluso algunas rescatadas desde el fondo del lago. Por su parte, el Puerto de Saxamani es el principal de la isla, siendo que Yumani es el más importante muelle, con jardines y una extensa escalinata que lleva a tres fuentes de agua.

La Isla del Sol dispone todavía de maravillosas playas, de aguas tan heladas que no están aptas para bañarse, pero con aguas cristalinas y excelentes para observar amanecer y puestas de sol de ensueño. Un ejemplo es la Playa de Japapi, un verdadero paraíso a las orillas del Lago Sagrado. Con una variada oferta de hoteles y restaurantes, la isla es sin duda un destino maravilloso para conocer durante la estadía en Bolivia.

Fotos: Isla del Sol, por Phil Whitehouse (1 y 3) y Olaf (2) (todas en Flickr)


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