Dando proseguimiento a nuestro recorrido por el litoral paulista, llegamos al sur del estado de São Paulo, en Brasil. Allí se encuentra Ilha Comprida (Isla Larga), que con sus 74 km de playas casi intocadas, además de linda vegetación, manglares, dunas y sitios arqueológicos, es un destino absolutamente imperdible para los amantes del mar y la naturaleza.

Situada a 209 km de la capital del estado, São Paulo, Ilha Comprida tiene tan solo cerca de 10 mil habitantes, lo que le da un aspecto de paz y tranquilidad únicos, en medio de un escenario natural maravilloso. Sin embargo, las playas suelen llenarse de turistas en algunos sectores, principalmente jóvenes y en especial en temporada alta, cuando el lugar adquiere un ambiente festivo.

Uno de los mayores atractivos de la ciudad son sus dunas, distribuidas a lo largo de su extensa orla y con aves típicas que suelen visitarlas, aportando un encanto especial al lugar. Las dunas de Araçá son las más conocidas, llegando hasta 10 metros de altura y proporcionando una vista espléndida del océano. Pero también hay otras, siendo que muchas terminan en lagunas igualmente bellas.

Entre las playas de Ilha Comprida, se destaca el Boqueirão Sur, donde piscinas naturales conforman un paisaje paradisiaco. En el Boqueirão Norte y alrededores, la animación es mucho mayor, mientras en el resto de la isla reina la tranquilidad. Pero todas ellas están muy bien preservadas y libres de la contaminación de otros sitios, razón por la cual este es considerado un paraíso del litoral brasileño.

Las opciones de ocio y diversión en la costa son múltiples. En la orla, vale la pena pasear de jeep, bicicleta o triciclo (hay empresas que ofrecen este servicio) y en el mar las alternativas incluyen surf, vela, kayak y canotaje, especialmente en el Mar Pequeño. Allí, también se encuentran villas de pescadores donde es posible degustar pescados y frutos de mar, además de realizar paseos en barco y conocer el modo de vida de los lugareños.

Pero la naturaleza no ha sido pródiga en esta región solo en la costa. En Ilha Comprida, una de las grandes opciones turísticas es aventurarse por las diversas sendas en medio a la Mata Atlántica. Las más extensas son las sendas Juruvaúva-Pedrinhas, Vila Nova-Sitio Arthur y Dunas-Juruvaúva, donde los atractivos van desde sitios arqueológicos hasta manglares. En la senda de Trincheira se pueden ver delfines en el mar y en Maravilha da Ponta da Praia, dunas y ruinas.

Además de todos los encantos naturales de Ilha Comprida, varios eventos realizados a lo largo del año hacen que la experiencia sea aun más placentera en este bello rincón de Brasil. La Muestra de Teatro, el Festival de Blues, el Circuito de Surf y el Carnaval son solo algunos de esos eventos, que sumados a diversas actividades culturales aumentan el atractivo de esta hermosa isla de la costa sur paulista.

Fotos: Ilha Comprida, por Mayckon.trudes y Diego Torres Silvestre (la primera en Wikipedia, la segunda en Flickr)


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