Bolivia es un fantástico país que, entre otros atractivos, cuenta con algunas de las montañas más imponentes y desafiadoras de Sudamérica, constituyéndose de esta manera en una excelente ruta para los aficionados del andinismo. El Sajama, el Illampu, el Illimani y el Huayna Potosí están entre los más increíbles nevados de este verdadero paraíso de los alpinistas.
El Sajama es un volcán extinto de la Cordillera Occidental de Bolivia, ubicado en el departamento de Oruro, más precisamente en el Parque Nacional Sajama. Con 6.548 m de altura, es el más alto pico del territorio boliviano, está rodeado por una impresionante fauna y flora silvestre altiplánica, con una gran cantidad de vicuñas y pumas, entre otros animales. Se trata de una región árida, con heladas frecuentes y temperatura promedio de 10ºC, aunque puede descender hasta -30ºC en el invierno.
Por su parte, el Illimani es una majestuosa montaña visible desde la ciudad de La Paz, y por esta misma razón un verdadero símbolo de la capital administrativa del país. Tiene 6.438 m y es la mayor de la Cordillera Real, y proporciona una impresionante vista desde su cumbre, con el altiplano, el valle e incluso el Lago Titicaca en el horizonte. Situado a unos 60 km de la urbe paceña, el Illimani atrae a muchos andinistas, que deben pasar por un periodo de aclimatación previo y tener especial cuidado en las pendientes de hielo.
A su vez, el Illampu (6.368 m), también conocido como Nevado de Sorata, se encuentra en la Cordillera Oriental de los Andes, en la provincia de Larecaja, en La Paz. Aunque no es la más alta de las cumbres bolivianas, los especialistas en ascensos la consideran la más difícil de escalar, entre las 14 que superan los 6.000 m de altitud. La ruta más accesible es bastante dificultosa y posee pendientes de hasta 65º, pero también se puede subir por la Ruta de los Alemanes. Canaletas de hielo y roca conforman el paisaje de esta montaña, que exige bastante experiencia de quienes se atreven a desafiarla.
Con 6.088 msnm, el Huayna Potosí es otra de las cumbres muy apetecidas por los aficionados al andinismo. Está ubicada a tan solo 25 km de la ciudad de La Paz, razón por la que es una de las montañas más concurridas de la Cordillera Real. Este macizo formado por roca, hielo y nieve tiene condiciones climáticas y de terreno complicadas, pero dispone de rutas más accesibles, aunque no fueron pocos los que perdieron la vida en el ascenso, por lo que es indispensable contratar un guía y tomar precauciones. También cuenta con rutas que exigen mucha técnica, recompensando a los aventureros con maravillosas vistas de la región andina.
Fotos: Huayna Potosí, por Mark Goble; Illampu, por Cody H.; e Illimani, por Alhen (todas en Flickr)
